miércoles, 13 de mayo de 2009

La Patronal ante la crisis

El discurso de una estoica, responsable y hasta patriótica moderación salarial, la absoluta flexibilidad del conjunto del mercado laboral (a merced de los designios del clarividente y visionario empresario) y un mayor abaratamiento del despido, llena las contínuas declaraciones de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), de la mano de su recientemente reelegido presidente, el Sr. Díaz Ferrán.
Unas medidas, discurso y declaraciones recurrentes, que hoy se amparan en las dramáticas y lamentables circunstancias por las que pasa tanto la economía española como la del resto de los estados.
De una manera previsible y cínica, la CEOE hace un llamamiento a la responsabilidad y al sacrificio de la sociedad española y en especial de los asalariados.

Llamamiento que hacen quienes en períodos de gran expansión económica no han tenido voluntad alguna de mejorar ni la calidad ni la estabilidad de los empleos, más bien al contrario, promoviendo la temporalidad y precariedad de los puestos de trabajo;

Quienes tampoco tuvieron la voluntad de aumentar los salarios, forzando a su congelación o a su recorte, eludiendo cualquier aumento significativo del coste laboral y todo ello a pesar del espectacular crecimiento de los beneficios empresariales conseguidos;

Quienes basaron su crecimiento e incentivaron éste, en sectores de bajo valor añadido y de una más que dudosa competitividad, sin prentender ir más allá del supuesto atractivo de un obsoleto producto de bajo coste y precio, idolatrando a la especulación y la explotación;

Quienes se asombran y denuncian la baja productividad, cuando nada acertado han hecho para incentivar su aumento, sinó todo lo contrario;

Quienes han estado dando muestras de una gran visión estratégica al ignorar la existencia de colosas economías extrangeras que ya cubrían o irían cubriendo y absorviendo progresivamente dichos sectores de bajo valor añadido;

Quienes ni siquiera han procurado luchar contra la lacra de la siniestralidad laboral, de forma sistemática y efectiva, considerando la prevención de los riesgos laborales como unas fatales y siniestras sombras sobre sus bollantes beneficios, una prevención entendida como lujo innecesario o molesto formalismo legal;

Quienes durante años trabajaron y presionaron para alejar cuanto fuera posible a la Administración Pública de la economía, una economía convertida poco a poco en feudo exclusivo de la patronal y sus propios intereses, que no del conjunto de la población;

Quienes invocan insistentemente al libre mercado y se abanderan como fieles defensores de éste, mientras se escudan en aranceles y otros mecanismos proteccionistas comunitarios;

En definitiva, la CEOE y su presidente tienen que comprender, y cuanto antes mejor, que AHORA quien debe ser responsable y sacrificada con la sociedad española, de forma ejemplar y extraordinaria, es precisamente la patronal.
Sólo dando muestras de su sacrificio y responsabilidad, la CEOE podrá conseguir que el diálogo social, en un proceso de creciente tensión, no se quiebre. Ya no es tiempo de sus grandilocuentes monólogos llenos de suficiencia y paternalismo hacia los trabajadores. Éstos ya han escuchado suficiente. Llevan largo tiempo escuchando. Los sindicatos y los trabajadores, todavía, están dispuestos a hablar; y esta vez, para ser escuchados.
La CEOE acumula una gran deuda social. Y la sociedad española demanda hoy su devolución inmediata.


David González
Secretari de Política Laboral de la JSC Les Corts

2 comentarios:

MachuPichu dijo...

Mu bien!

Anónimo dijo...

Tens tota la raó, David!!!
Gran article, FELICITATS!!!!